En los últimos años, el director y actor británico Kenneth Branagh ha basado su filmografía en filmar taquillazos y blockbusters que estaba muy lejos de grandes trabaos como Enrique V, Morir todavía, Los amigos de Peter, Mucho ruido y pocas nueces o Hamlet. Sin embargo, parece que el cineasta ha decidido momentáneamente volver a sus orígenes y ofrecer con “Belfast” una carta de amor al pasado encabezada por Jude Hill, Lewis McAskie, Caitriona Balfe y Jamie Dornan.
Belfast busca seguir al joven Buddy mientras navega por un pasaje de lucha obrera, cambios culturales radicales y una profunda violencia sectaria. Buddy fantasea con un futuro glamuroso que pueda alejarlo de los problemas, pero, mientras tanto, se conforma encontrando consuelo en su carismático padre y su madre y en sus alegres abuelos.
El filme, que es uno de los grandes favoritos para arrasar en los próximos Premios Oscar es, sin lugar a dudas, la mejor película que ha rodado Branagh en el siglo XXI. El cineasta ofrece un retrato emotivo y conmovedor acerca de la infancia y de la familia, que ofrece sentimentalismo, pero sin abusar de él ni caer en lo empalagoso.
Belfast permite al espectador poder verlo todo a través de la perspectiva de Buddy, que está interpretado con energía y sinceridad por el debutante Jude Hill, quien no podría iniciar su carrera de una forma más redonda. Es una película que no se olvida y que busca permanecer en la mente del espectador durante mucho tiempo gracias a una historia muy bien elaborada y a unos personajes creados e interpretados con absoluto virtuosismo.
Si su historia y sus interpretaciones son los principales elementos gracias a los que Belfast funciona, no podemos dejar de mencionar su asombrosa fotografía en blanco y negro, que permite al espectador meterse de lleno en la historia y disfrutar de Belfast como el regalo cinematográfico que es y como una de las principales sorpresas de la temporada.
Valoración: 4,5/5
Lo mejor: La exquisita construcción de sus personajes y la historia tan tierna que relata. Su fotografía en blanco y negro es maravillosa
Lo peor: Que haya quien crea que busca abusar de lo emocional, cuando la realidad es todo lo contrario.
