Quienes lo vienen oyendo hace tiempo, lo saben. Desde las sombras del underground argentino Motín.82 viene siendo un jugador de toda la cancha. Como productor y como rapper despliega una variedad de estilos y talentos que ascienden y se amplían cada vez más. La meta de una excelencia según una vara personal y no que dependa del afuera viene guiándolo por caminos sinuosos donde no son pocos los desafíos a la hora de encarar producciones, “mi búsqueda es artística, se escapa de lo trending” suena en este joven proyecto. Y así, Motín luce su capacidad de domar los parámetros externos a partir de su propio deseo de experimentar.
El estilo prolijo y sólido que caracteriza a este artista, quien gusta de concentrar mucho contenido y muchos juegos métricos por track, brilla de una forma distinta en su nuevo álbum, “Robarse Shanghái”, que vio la luz este 9 de julio. En su proyecto más experimental hasta el momento, la multiplicidad de referencias a la cultura internacional pero más que nada a la argenta (de la mano del uso del léxico y de personajes tan diversos como César Luis Menotti, Ricardo Darín, Luis Alberto Spinetta y Alejandro Dolina, además de alguna barra más bien tanguera, entre tantísimos más ejemplos) se vuelve parte clave de lo miscelánea que es la identidad de sus ocho temas, que incluyen featurings con Kelo, de Kamada (en una clave que le vimos develar más bien en sus últimos trabajos), y Dante Pereyra, además de la voz de Fiyo RFL.
Miscelánea pero coherente, caótica pero armónica. Estas características mucho tienen que ver con las punzantes influencias que pueden verse en el arte audiovisual y de tapa del álbum, a cargo de Luis Ángel (BLOCK! Estudio) y del mismo Motín, que exhiben una tipografía que cualquier fanático de Kendrick Lamar reconocerá, así como un guiño a aquel diseño de un profesor de Bellas Artes que acabó en la tapa de “Momo Sampler”, de la legendaria banda de rock Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. “De hecho, el concepto de Shanghái nace gracias a su frase ‘Pará mi amor, esto está muy Shanghái’,” nos cuenta Motín.82, “el Indio explicó que ‘muy Shanghái’ significa que algo es muy caótico, haciendo un símil con la ciudad china, y yo quería “robarme” esa esencia de Shanghái. (…) En cuanto a la tapa, quise transmitir lo caótico que fue esa búsqueda experimental, quería combinar elementos chinos clásicos y otros modernos, haciendo referencia a la mezcla de sonidos que se puede encontrar en el disco.”
Toda esta experimentación se oye también instantáneamente en la estética sonora track tras track, al notarse que chocan elementos como samples de Charly García, toques de lo-fi y un oscuro chill hop mixeado en las producciones de OCHO.DOS y Juana Ruda, además de las atractivas construcciones métricas que Motín suele ofrecer en sus producciones. En esta ocasión, de todas formas, brota su perfil más versátil, animándose a algunos sonidos que le habíamos oído en menor cantidad. En sus propias palabras: “Poco tiempo después de sacar ‘Una Serie de Posibles Aciertos’ (2018) empecé a replantearme mi relación con mi música y a preguntarme cuál iba a ser mi siguiente paso. (…) Si bien siempre trataba de salir de mi zona de confort a la hora de crear, lo hacía de una manera ‘tímida’, y me di cuenta también que lxs artistas que más escucho (y más me inspiran) rompen con esa lógica y se animan más.”
A pesar de que luego de aquel proyecto lo vimos a Motín brillar como productor (recordemos que fue una parte clave del disco de Kelo Kamada, “L.E.A.L.”, salido en octubre de 2020) y como MC —sus EPs “Stock” (2019) y “Egotrip” (2020) son valiosas experiencias para escuchar y disfrutar—es evidente que este lanzamiento se posiciona como el proyecto más redondo de su carrera hasta el momento. “En 2019 arranqué a trabajar como productor a tiempo completo”, le cuenta Motín a Nostromo, “y eso me dio más herramientas para desarrollar la estética del disco. Son muchas cosas nuevas de golpe, así que entiendo que puede sentirse desde afuera como un quiebre, aunque también siento que hay constantes en mi forma de encarar la música, y creo que esa esencia sigue ahí y que se reconoce a Motín entre tanto sonido nuevo.”
Su recorrido hasta la fecha que trae consigo un talento deslumbrante en posesión de un artista que busca día tras día formas de reformarlo, potenciarlo y canalizarlo en métodos más bien difíciles de hallar a la hora de hacer hip hop. Su nuevo proyecto, “Robarse Shanghái”, se planta como uno de los discos del 2021 si de underground argentino hablamos, particularmente en el campo del estilo que caracteriza a Motín y en el auge de la variedad de sonidos que recorren este perfil de la escena nacional, que se encuentra en un momento de florecimiento y diversidad que alegra y satisface al público local e internacional.
Foto de Portada: Portada del Álbum ‘Robarse Shangay’ de Motín.82