‘El Cuento de la Criada‘ no ha podido llegar en un mejor momento. En un año de reivindicaciones y en el que se reclama igualdad, la serie original de la plataforma Hulu viene perfecta como crítica y como relato amargo y crudo de lo que muchas mujeres han tenido que sufrir a lo largo de la historia.
Fue una de las revelaciones de la pasada temporada y cuenta con una multitud de premios a sus espaldas. Sin embargo, hay algo que no funciona bien y que hace que el espectador se pueda alejar: es demasiado gráfica, agresiva y desagradable de ver. Lo que era una descripción convincente y muy realista se ha convertido en un culebrón sensacionalista y muy explícito.
A ‘El Cuento de la Criada’ le gusta profundizar en su dolor y hacer pasarlo mal al espectador, pero todo tiene un límite, y este se ha sobrepasado en una segunda temporada demasiado brutal. La serie empezó discreta, pero ha ido aumentando su morbo cada vez más. Ya no interesa y sus tramas son cada vez más repetitivas. No ofrece nada nuevo y lo único que ha conseguido es que, a ese público que consiguió conquistar en 2017, mire para otro lado en 2018. No todo vale.