Escrito por Jorge Caracuel Suero
En 2013 se estrenó «Expediente Warren: The Conjuring», una de las películas de terror que más sustos ha causado de la década. Para los amantes del género, el filme de James Wan era de los más inquietantes que habían visto nunca.
Como era de esperar, su spin-off no tardó en llegar. En 2014 se estrenó «Anabelle». Pese a que James Wan no dirigía la cinta en esta ocasión, las expectativas estaban por las nubes. Sin embargo, nada salió como se pensaba. El filme carecía de tensión alguna, y sus escenas de miedo eran bastante ridículas.
Aunque parecía improbable, Hollywood ha querido volver a probar suerte y, para ello, han confiado el proyecto a David F. Sandberg, responsable de la exitosa y aterradora «Nunca apagues la Luz».
Foto: Variety.com
Con esta secuela se consigue algo que pocas veces sucede: que la segunda parte sea bastante superior a la original. Aunque no esté a la altura de las dos cintas de Expediente Warren, sí que sabe captar su esencia, y hay escenas que dan miedo del bueno, gracias al potente climax de tensión que consigue.
El ambiente, las secuencias y sus personajes harán que pases terror del bueno y que lo disfrutes como si fuera el primer spin-off de Anabelle, sin tener en cuenta su fallida primera parte.
Valoración: 3/5
Lo mejor: Da mucho miedo y mantiene la tensión en todo momento
Lo peor: Es más de lo mismo y muy predecible