Bond a Bond: George Lazemby y su única ocasión al servicio de Su Majestad

Escrito por Rubén Pareja Ramírez

«Esto no le pasaba al otro Bond», dice un George Lazemby atónito mientras ve cómo la Condesa Tracy de Vicenzo coge su coche en la playa para llegar más arriba, donde se encuentra aparcado el suyo y huir del sitio, tras haberla amenazado unos matones. Así comienza «Al servicio de Su Majestad» (1969), la única película en la que el actor australiano interpretó el papel de James Bond.

Que esta película es antigua está claro, pero que es entretenida lo es aún más. Antes de proseguir con el artículo, hay que avisar de los spoilers a los que los lectores se enfrentan si continúan leyendo. La película, hasta ahora la más larga de todas las que componen el Ciclo 007, tiene muchos puntos fuertes, entre ellos su genial banda sonora. En ella no hay letra, ya que, según sus productores, era difícil hacer una canción en la que dijera «On her Majesty’s Secret Service». Por eso, el compositor, John Barry, hizo ese genial tema a ritmo de reloj que, en los créditos, avanza marcha atrás. Este tema vale tanto la pena como el «We have all the time in the world», interpretado por Louis Armstrong.

«Al servicio de Su Majestad» es una película determinante en la historia de James Bond, en el sentido de que en ella tiene lugar un acontecimiento destacado en la vida del agente, a la que se hacen menciones en algunas de sus películas posteriores.

latest

 Foto: Fotogramas.es

Tras adelantarle a toda velocidad una mujer en un vehículo rojo, James Bond la sigue hasta la playa, donde se baja y evita que ésta se ahogue en el mar. Tras esto, el agente 007 se enfrenta a unos matones de los que se libra fácilmente, mientras que la mujer coge su vehículo y avanza unos metros hacia arriba, que es donde había dejado su coche, y huye. Aquí tiene lugar el primer chiste de la película, en la frase citada por Lazemby al principio, que en España eliminaron en su día.

Bond se dirige a un hotel para hospedarse, donde reconoce el vehículo rojo, que está aparcado en la puerta, y uno de los encargados del lugar le explica que se trata de la Condesa Tracy de Vicenzo. Bond, que, tras encontrarse con ella en el casino, pasa la noche con ella, es secuestrado al día siguiente por unos matones encargados por el mismo padre de la Condesa. Éste le pide a James que se case con ella, ya que ve la necesidad de que su hija esté al lado de un hombre como Bond. Y, aunque éste reconoce que su trabajo no le permitiría dedicar tal atención a Tracy, accede a la propuesta con la condición de que su futuro suegro le revele el paradero del malvado Blofeld, lugar que conoce bien.

«Al servicio de Su Majestad» es la primera película del Ciclo Bond en la que vemos una persecución por la nieve. Dicho momento se desarrolla en Suiza, que es donde el agente se dirige para cazar a su enemigo. Allí tienen lugar también inquietantes huidas en coche y unos movimientos de cámara violentos, cuando el personaje está dispuesto a saltar desde grandes alturas. Toda esta aventura concluirá en el rescate, por parte del inglés, a su futura prometida, que estaba de viaje también en Suiza y que ahora se encuentra secuestrada por Blofeld, y con la que acabará casándose al final de la película.

¿Queda claro cuál es el elemento principal en «Al servicio de Su Majestad»? Por alguna razón, tras ver en la cabecera relojes que avanzan hacia atrás, una banda sonora inspirada en el ritmo de un reloj y las alusiones a que se tiene todo el tiempo del mundo, igual que lo menciona Armstrong en su balada, puede parecer el tiempo, aunque éste luego no tiene ninguna mención en la película, hasta el final de ésta.

George Lazemby consiguió su papel de James Bond tras habérsele ofrecido a Roger Moore y Timothy Dalton. Am

Compártelo

Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp
Novedades semanales.

+ Artículos relacionados