En su ópera prima, Nicolás Pacheco nos presenta una historia ambientada en un poblado andaluz. Probablemente, pasará desapercibida, pero Jaulas es una de las mejores películas del año y, sin lugar a dudas, la más especial.
El filme nos presenta la historia de una madre y una hija que, hartas de un ambiente opresivo por parte de un hombre cruel, deciden arriesgarlo todo y escaparse a la ciudad, donde lucharán por liberarse de las jaulas que siempre han sido sus vidas.
Jaulas comienza con un retrato perfecto de sus personajes: los radiografía detalladamente para que el espectador sepa ante qué tipo de personas se está enfrentando, además de presentar una curiosa historia de amor. Después, con la llegada a la ciudad, las dos protagonistas se van mostrando de otra forma, sin perder su esencia mientras que plantea otra divertida y curiosa historia protagonizada por Antonio Dechent y Stefan Mihai.
Durante sus 90 minutos de duración, no pierde el interés en un solo segundo. Atrapa desde la primera escena y una de sus virtudes es que no busca suavizar la realidad, sino que ofrece un drama social crudo, sincero, necesario y eficaz amenizado con algunas escenas más cómicas, con una Estefanía de los Santos entregadísima y que pone la guinda a un pastel contundente y exquisito.
Valoración: 4/5
Lo mejor: Que no busque ser suave. Quiere presentar la realidad tal y como es
Lo peor: Que mucha gente se pierda el mejor drama social del año
