Escrito por Miguel Rodríguez Rodríguez
Después de comenzar a ver la primera temporada del inicio de la serie, la que dio comienzo a una saga y que llega hasta nuestros días, me quedé maravillado de los guiones tan originales, la modernidad aportada para esa época, con teletransporte, móviles, tabletas, etc., todo de una forma rudimentaria, naif y que tiene un origen científicamente vago.
Demasiado moderna para su época pero que, hoy en día en soportes digitales como Netflix podemos ver como van modernizándose y dándonos cuenta de cómo van cambiando en efectos especiales, personajes y diferentes tramas de guiones y situaciones. Además, también se han hecho películas para la gran pantalla y que ya compite con otra mitológica como son las de 007.
El secreto de tan larga longevidad de supervivencia de esta serie es que la historia es muy interesante y siempre corre al reclamo de ir por la ultima frontera, que hoy nos parece infinita como vasto es el espacio.
Me seguirá gustando la tripulación del Enterprise por la diversidad de raza, igualdad entre género masculino y femenino y lo que me parece más sorprendente: parece la tripulación de un barco velero que surca un océano inexplorado en busca de nuevos horizontes hasta el infinito.