Recuerdo que, cuando unos compañeros del instituto vieron Torrente 4 un poco antes que yo, dijeron que “evidentemente, tenía que haber otra parte de la saga”. En efecto, tres años después, y debido al final de su predecesora, se estrenó en los cines Torrente 5: Operación Eurovegas.
En esta película, Santiago Segura nos lleva a un viaje en el tiempo a una España en 2018, si bien aún estábamos en 2014. Al igual que Robert Zemeckis falló en Regreso al Futuro II sobre que tendríamos, por ejemplo, coches voladores, según Torrente 5 el año pasado habríamos vuelto a la peseta y Cataluña ya habría conseguido independizarse de España, lo que convierte a esta trama un tanto surrealista. Torrente, que ya sale por fin de la cárcel, se dirige a varios lugares de Madrid y, después de quedarse horrorizado al ver varias cosas, ante tamaña decepción, decide vengarse de la sociedad. Es por ello que pasa a convertirse en un fuera de la ley.
Su objetivo, de este modo, es planear un atraco en el “Eurovegas”, el fracasado proyecto de casinos que se tenía previsto construir en las afueras de la capital española. Para esta aventura, Torrente está acompañado, por un lado, de Jesusín (Jesulín de Ubrique) y también de Cuco, aunque esta vez no lo interpreta Gabino Diego, sino Julián López, famoso por sus apariciones en los programas de humor “La Hora Chanante” o “Muchachada Nui”.
El ex-policía completa su cuadrilla con personajes famosos como Anna Simón, Angy, Florentino Fernández y Carlos Areces, estos dos últimos un punto fuerte de la película. Sobre todo Areces, que interpreta a Ricardito, cuya peculiar personalidad es capaz de sorprendernos…
Santiago Segura cuenta, en esta ocasión, además, con el actor estadounidense Alec Baldwin, que aparecía como buque insignia de la película en los trailers mientras intentaba pronunciar bien “¡Ole mis huevos!”. Al “reparto” de Segura se unen también nuevos fichajes que resultan ser populares en el momento, como “El Hombre de negro”, o algún que otro youtuber. Regresan también personajes de la primera entrega: Reme (Chus Lampreave) y Amparito (Neus Asensi). Ahora Torrente, despojado de su vivienda, es un inquilino en la casa de la anciana. Por no hablar de una trupe de personajes más, entre los que destaca nuestro querido Chiquito de la Calzada.
¿Qué te digo de “Torrente 5”? Pues que me hizo falta verla de nuevo para hacer una crítica en condiciones, porque ya no me acordaba bien de la peli. Ni siquiera de lo buena que es. Sí. Esta parte supone un repunte espectacular por parte de Segura. Enhorabuena desde aquí. Otra intro espectacular que, al ser animada, me recuerda bastante a la de “Casino Royale” (2006), al ritmo del sensual tema “Eurovegas”, que interpreta Mónica Naranjo.
“Torrente 5” es un Torrente de torrentes. Porque se nutre de muchos elementos de sus partes anteriores. Tenemos de nuevo a Cuco, como ya hemos mencionado; a Reme y a Amparito también. Y tenemos varias frases sacadas de sus anteriores partes que nos hacen volver a reírnos y a sentirnos como en familia, cómo no (las 6.000 pesetas de güisqui; las bragas de Amparito, etc.).
En cuanto a las escenas de acción, aunque no tengamos muchos momentos trepidantes, sí destaca, por ejemplo, el montaje en el que Torrente habla con un joven Tony Leblanc, lo que resulta ser un homenaje al fallecido actor. Por supuesto, aquí no falta la guarrería tampoco, en especial la técnica del “Mortadelo”. También le esperan a nuestro héroe algunas sorpresas en el coche cuando incita a los demás hacer aquello que todos conocemos.
Podremos ver a Torrente junto con su equipo protagonizando momentos buenos de acción, cual película de atracos profesionales, ¿eh? Con sus buenos atuendos y su material sofisticado para la ocasión. Bueno, esto me recuerda a lo que le ocurría a Leonardo Dicaprio en cierta escena de El lobo de Wall Street…
También resulta agradable ver cómo, tras los acontecimientos que ocurren en cierto momento de la película, Torrente acaba probando de su propia medicina. Lo cierto es que en Torrente 5 no hay lugar para el aburrimiento y hay mucho para pasarlo bien. Es una película bien trabajada y conseguida. Es por ello que muchos críticos sitúen a esta película en el tercer lugar, de mejor a peor (1, 2, 5, 4 y 3). Quizás sea el momento de que Segura se empiece a plantear una continuidad de la saga para un futuro no muy lejano…
Otro aspecto positivo de Torrente 5 es el de los créditos. No pienses en quitar la película cuando aparezcan éstos, ya que hay sorpresita. A Santiago Segura no le gusta que la gente se marche durante los créditos. Por eso, en El brazo tonto de la ley metió al final ese plano de la ambulancia marchándose después de escuchar a Kiko Veneno. Vale, es obvio que no resulta ser una gran recompensa ante tamaña espera, pero, en esta ocasión, lo bueno sí se hace esperar, y nos dará la última carcajada. De mientras, podemos disfrutar escuchando la “Chirigota Torrentina” que, curiosamente, esta y “Eurovegas” son las dos únicas canciones que suenan durante la película.