La saga Transformers se había quedado atrapada en un bucle que no la beneficia para nada. Con una buena primera entrega y con una segunda y tercera entrega irregulares, la cuarta y, sobre todo, la quinta, fueron un despropósito que ya no había por donde coger. Había perdido todo su encanto y estaba anclada en un bucle del que no podía salir. Por ello, Bumblebee es un spin-off necesario que nos ha hecho recuperar la confianza en la famosa saga.
Bumblebee se centra en el hermano pequeño de los Autobots. Bajo la dirección de Travis Knight, responsable de la majestuosa Kubo y las dos cuerdas mágicas, la cinta es puro entretenimiento familiar que tiene la misma acción pero el doble de encanto que sus predecesoras.
El largometraje no solo recupera el espíritu de la primera Transformers, sino que lo eleva. Es cierto que es un producto muy comercial y que no nos ofrece nada novedoso, pero funciona y todo lo que sucede en ella está muy bien.
Bumblebee es nostálgica, está llena de momentos emotivos y es, sin duda, la mejor película del universo cinematográfico creado por Michael Bay de lejos. Sus actuaciones son sinceras y el carisma de Hailee Steinfeld consigue dar a su papel un carácter real y melancólico. Ahora, la saga sí que nos ha ofrecido el entretenimiento que nos merecemos.
Valoración: 3,5/5
Lo mejor: Es un producto de entretenimiento de primera categoría
Lo peor: No deja de ser un filme comercial que se recicla del resto de la saga
