Dolph Lundgren, sencillamente apasionante

Por Rubén Pareja Ramírez

Uno de los actores contemporáneos que me fascinan es el sueco Dolph Lundgren. La primera vez que lo vi fue en ‘Los Mercenarios’, cuando puse la película allá por el verano del 2012, para ir un día después al cine a ver la segunda parte de estas geniales películas.

Mundialmente, este actor se dio a conocer por su famoso papel de Iván Drago, el boxeador con el que Rocky se enfrenta en su cuarta película (1985), tras haber acabado con la vida de su amigo Apollo Creed en el ring. El sueco interpreta a un despiadado titán, en una cinta propagandística en pleno contexto de la Guerra Fría de estadounidenses contra soviéticos. Lundgren representa aquí a un personaje prácticamente mudo, ya que su guión durante toda la película ocupa menos de diez renglones en total. Su discurso más largo tiene lugar cuando comparece ante todas las cámaras frío, sin remordimientos, tras haber matado a su contrincante en una pelea que realmente era de exhibición. Entonces tiene lugar uno de los muchos errores en el doblaje español: «Esta muerto. Muerto», sentencia en español el ruso, cuando, en realidad, dice «If he dies, he dies (si muere, muere)».

Pero, antes de encarnar al, Dolph Lundgren ya había tenido otro papel que lo catapultó en el cine. Aunque es lógico pensar que, gracias a su físico, el sueco pudo haber saltado a la fama solito, su salto a la gran pantalla lo hizo gracias al pequeño empujoncito de alguien: Grace Jones.

La famosa cantante era novia del actor a mediados de los ochenta. Y, en aquellos años, ella se encontraba rodando ‘Panorama para matar’, la última película en la que Roger Moore interpretaría al agente 007 y en la que ella hacía, junto a Christopher Walken, de villana, en el papel de «May Day» (otro fallo garrafal tiene lugar en el doblaje, al hacernos creer que nuestro héroe tenía que salvar el «Valle de la Silicona»). Al parecer, los productores manifestaron la necesidad de poner a una persona con un físico acorde con el de Dolph. Por eso, este aparece en una escena en la que el malvado Max Zorin (Walken) tiene una discusión en un hipódromo con algunos miembros de la KGB que hace que lleguen a las pistolas. Ahí está el sueco serio, muy bien arreglado y enchaquetado, instantes antes de ponerse a disparar a los atacantes de Zorin y Mayday. En esta película, el sueco interpretaba a un tal Venz que, al parecer, no figuraba en los créditos ni nada…

El físico de Lundgren le permitió ser uno de los iconos de los ochenta, junto con Stallone, en películas como He-Man o El Castigador (1989). En esta última película, el actor interpreta a Frank Castle, un antihéroe expolicía que, tras perder a su mujer y a su hija, ambas asesinadas, se dedica a dar su merecido a la escoria de la ciudad, cada vez que estos malechores cometen algún homicidio. El papel del sueco en esta película resulta entretenido, si bien a la película quizás le falta algo de ritmo. Acostumbrados a ver al actor tan serio, por lo general, sus chascarrillos le hacen parecer a Bond en ocasiones.

Al verlo de villano en Rocky IV y al ver su físico de joven, cualquiera puede imaginarlo aquellos años quizá en el trono de ‘Mujeres y Hombres’, pero, como dice el refrán, las apariencias engañan. Dolph Lundgren es un superdotado, un actor titulado en ingeniería química (de ahí que se aprovechase esto en ‘Los Mercenarios’ cuando tratan de buscar una salida en el lugar donde están atrapados) y con una buena relación con Málaga. Concretamente, tiene una casa en Marbella, donde suele pasar sus vacaciones. Por eso, en 2009, el Ayuntamiento de la ciudad le dio el título de Embajador de la misma, debido al conocimiento que y la capacidad de ejercer influencia en el extranjero que el actor tiene de allí. Además, en esta misma ciudad, recibió, en 2007, el galardón «Linterna Fantástica», que le concedió la Semana Internacional de Cine Fantástico de Málaga en su XVII edición. Y, en la Semana Internacional de Cine Fantástico de Estepona del 2009, recibió el galardón «Unicornio de Honor X Aniversario».

Dolph va a aparecer de nuevo en los cines muy pronto. Una de las películas en las que saldrá será ‘Aquaman’, una película basada en el superhéroe de DC Cómics, en la que interpretará al Rey Nereus de Xebel. Y otra de las entregas en la que estará será ‘Creed II’, la segunda parte de la secuela de ‘Rocky’, que ahora protagoniza el hijo del malogrado Apollo. ¿Adivinas a quién le toca volver a interpretar a Dolph, en esta ocasión, haciendo de padre del que será rival del protagonista?

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