El 2022 está demostrando ser un amplio terreno de cosecha para géneros como el neo-soul y el R&B contemporáneo, potenciando el florecer de artistas en todo su esplendor a través de los varios países angloparlantes, así como también en territorios donde estos géneros no habían sido tan explorados previo a este último par de años.
Este reverdecer que hasta tironea a algunos y algunas artistas pop a inclinarse a por esos lares tiene que ver con una variedad de factores que incluye entre ellos la influencia de álbumes que dejaron una huella profunda en la música recientemente. Acompaña, sin dudas, cierta revalorización de referentes de estos géneros pertenecientes a la fructífera década de 1990 y principios de los 2000.
En la lista de álbumes de los últimos años que han marcado un momento y que han abierto puertas, ventanas y portones no puede faltar “Ctrl”, el debut discográfico y hasta la fecha el único disco de estudio de la talentosísima artista de Missouri, SZA. De aquel 2017 donde este proyecto vio la luz han pasado cinco años en los cuales se han alzado más y más voces que predican sobre el mismo género, pero, a la vez, es importante resaltar la visibilidad nacional e internacional que comenzó a generarse para este tipo de artistas. Underground y mainstream, emergentes e instalados, cantantes de todo tipo se propusieron acercarse a las propuestas musicales que esbozó SZA en su disco, algunos con más éxito que otros, algunos desde un sitio artístico más personal, otros como meros ecos de lo que ya conocíamos en materia de R&B y neo-soul (e incluso cayéndose hacia fórmulas más propias del pop).
Sin embargo, el contexto en el cual SZA lanzaba “Ctrl” era de pura expectativa por su ya familiar presencia alrededor de shows en vivo y producciones que le otorgaron un merecido renombre, formando parte del tejido de, por ejemplo, el hit “Feeling Myself” de Nicki Minaj y Beyoncé en 2016. Su pertenencia a la discográfica que le echó el ojo, la hoy consagrada “Top Dawg Enterntainment”, comenzó hace casi 10 años, y desde ese espacio fue que lanzó sus mixtapes “See.SZA.Run”, “S” y “Z”, que, a pesar de cierta informalidad en los métodos de grabación de los dos primeros, alcanzan altos niveles de calidad tanto lírica como sonora, y una potencia de contenido original que comenzaba a rodear a SZA en todos sus emprendimientos. Entre esos emprendimientos, podemos resaltar colaboraciones con representantes del terreno hip hop, como Chance The Rapper, ScHoolBoy Q, Isaiah Rashad y hasta 50 Cent.
Menos de un año después del lanzamiento de su disco solista SZA también participaba de “All The Stars” en colaboración con una de las figuras más importantes del hip hop internacional como es Kendrick Lamar, quien la convocó personalmente para este featuring premiado con un Academy Award y un Golden Globe, parte de la celebrada banda de sonido original de la película de Marvel “Black Panther”.
Lo cierto es que algo que recorrió la estructura vertebral de la carrera de SZA antes y después de este disco fue también el rodaje de shows en vivo que supo construir, sumándose a proyectos largos con muchos destinos donde sus codos se rozaron con artistas y productores a los cuales conquistó no solamente con su talento sino también con su aura musical tan especial.
Esto último es sin dudas algo con lo que el álbum “Ctrl” deslumbró en 2017 y sigue deslumbrando hoy en día: a través de un atinado oído musical y de una serie de cualidades que se funden muy bien para crear la alquimia necesaria para un gran disco, SZA vuelca sobre encantadoras instrumentales estrofas y estrofas de una poesía que es llevada por una hermosa voz llena de distintas texturas y colores. Esa poesía, además, explora desde una simpleza práctica, sensata pero sentida, situaciones cotidianas con las que muchas personas, jóvenes y no tanto, podemos identificarnos. A través de todo esto, logra proponer actitudes y conductas que apuntan directamente a echar luz sobre la propia identidad y a defenderla. Todo esto combinado, además, con las muchas veces en entrevistas y charlas en las que la misma artista relató episodios de su vida para ilustrar lo atadas a la realidad que se encuentran sus letras, como comentó a MTV en 2017 que es el caso de la canción “Supermodel”.
A principios de este mes, como celebración del quinto aniversario del disco, SZA nos presentó con su versión deluxe, que aumenta su volumen a través de siete tracks que ven la luz por primera vez, entre los que se puede encontrar una versión alternativa de “Love Galore” y más temas inéditos que no tienen desperdicio.
Lo alternativo de “Ctrl”, con su energía simultáneamente suave y fuerte, representó, por un lado, la consolidación indiscutible de una artista inmensamente talentosa en la escena estadounidense e internacional, y, por otro, la elevación de la vara de calidad para el R&B contemporáneo y sus géneros aledaños, algo muy saludable y que nos ha generado más de una alegría en cuanto al impulso a la frescura en ese ámbito, que alberga hace ya rato a aristas increíbles como Kehlani, Jhené Aiko, Summer Walker, Kali Uchis, H.E.R., Ella Mai, Ari Lennox y tantas más, además de a la increíble SZA.