Kevin Pons Giner, conocido artísticamente como KOVO, decidió hace unos años iniciarse en el mundo de la música. Nacido en el año 98 y de origen francés se decantó por el género urbano, concretamente el trap y afrotrap ritmos que escuchó desde siempre en su familia. Hace unos días pudimos hablar con él en su ciudad natal, Oliva (Valencia), sobre su trabajo y sus aspiraciones en la música.
¿Cómo llegó la música a tu vida?
Cuando era pequeño, pero nada que ver con el rap ni eso. Más bien era música de los 70 u 80, la que escuchaban mis padres. Pero ya más crecido, en la época de Nyno, Aloy y todos estos, fue cuando me empezó a influir.
¿Por qué te decantaste por el género urbano? Rap, trap, afrotrap…
Pues por eso, los primeros artistas que me empezaron a influir eran de ese género y yo veía que me salía con soltura… Aunque no lo hiciera bien me gustaba todo, el ritmo en sí me volvía loco.
¿Por qué dedicarte a la música? ¿Ahora estás centrado en esto al 100%?
Vamos a decir que es lo único que se me da bien y que no me cuesta trabajo hacer. En plan, yo a la hora de escribir canciones me resulta fácil, no sé me sale natural.
Estoy trabajando todavía pero vamos a poner que estoy un 70% centrado en la música y la intención es llegar al 100%. Hay muchos proyectos por delante.
¿Qué aporta KOVO a la escena actual que no aporta nadie?
Esa pregunta es interesante. Realmente ahora mismo creo que intentar demostrar que las cosas hay que hacerlas bien desde el principio. No ir con prisas hacer mucho y mal, hacerlo bien y con calma. Aportar más de lo que aporto yo ahora mismo es muy fácil, pero creo que esa calma está bien y no todos la tienen en cuenta. Hacer las cosas bien.
Además, no solo hago un género en sí y me alejo del rap. Mi intención es sonar melódicamente como sea pero que mi mensaje, las liricas, sigan siendo rap. Versatilidad.
Estás sacando poco a poco nuevos temas que forman parte de algo más grande. Empezaste con Mbappé, seguiste con PMG y el más reciente 271840, el de los numeritos, como tú mismo lo has llamado. ¿Qué es lo que se viene?
Buf…, pues se vienen otros temas, tres ya grabados, otro estilo para que no te quedes con un solo rollo y pienses este chaval solo canta esto. No, este chaval hace otras muchas cosas. Y en lo audiovisual, tema videoclips, nos vamos a centrar en algo más grande, heavy.
¿Vamos a escuchar alguna colaboración? ¿Con quién te gustaría colaborar?
No. Y tampoco me gustaría nada por ahora.
Como ya hemos mencionado te dedicas al género trap, pero has hecho varios subgéneros dentro de este, ¿en cual te sientes más cómodo?
Sin duda afrotrap. No sé, lo llevo dentro. Mi familia es francesa y he bebido esos ritmos desde pequeño, es algo que me ha movido siempre. Como el flamenco a los gitanos, me sale de dentro. Tampoco es que me quiera dedicar solo a esto. Como ya he dicho quiero demostrar versatilidad y aunque es lo que más fácil y más cómodo me resulta quiero tocar mil palos y demostrar que me adapto, si me ponen una base flamenca también podría adaptarme. Además, el afrotrap tiene muchas variaciones dentro del mismo y estoy seguro de que todavía faltan más por descubrir.
Ahora cuentas con un equipo profesional, háblanos de tu productor y del filmmaker.
Mark Dayle es cantante y productor. Es un genio con el ordenador y las teclitas. Lo admiro mucho ha mejorado como cantante y es un crack. Lo conozco desde siempre, desde que éramos unos críos, y con el tengo una complicidad bárbara para trabajar, algo necesario para crear arte.
Con Llorka es otro tema, lo conocí de casualidad sin esperarlo. Buscando para grabar un videoclip me saltó su publicidad, ahí le pregunté y cuando me pasó la tabla de precios dije vale hasta aquí hemos llegado, ciao. Es lo que vale su trabajo y yo no podía pedirle pagar menos. Al final, con el tiempo, le dije que sí. Tenía una canción increíble, buena letra, bien producida…, y como ya he dicho las cosas hay que hacerlas bien, el vídeo no podía quedarse atrás.
¿Cuál es tu mayor aspiración en la música?
No tengo una meta concreta, cuando más alto llegue mejor. Dejar a los míos tranquilos. Que mi familia pueda vivir bien y que yo también pueda hacerlo. No tener que trabajar más, bueno la música es un trabajo pero ya sabes… Hacer algo que me apasione y no me resulte un esfuerzo. Como sueño loco, nada de premios… Igual tocar en el Lollapalooza.
¿Cómo te imaginas la escena el trap español en unos años? ¿Crees que tiene mucho que aprender todavía de otros países?
Tiene una barbaridad que aprender. La verdad que España te puede salir por cualquier lado, hay muchísimo potencial y talento. Debería mirar más a Estados Unidos que es otro rollo, otra industria, unida y desarrollada. Kidd Keo a mi parecer es lo más similar a ese trap americano. Pero hace falta más seriedad, los traperos tienen que hacerse respetar no solo en la calle, también como personas, profesionalmente.
Recomiéndanos un artista underground.
Lopes, sin ninguna duda. No hay nada más underground que Lopes. Si me pides un artista que este escuchando mucho es Kidd Keo, me ha sorprendido, pensaba que ya se había pirado y no.
¿Qué consejo le darías a alguien que quiere dedicarse a esto y no se atreve?
Primero que lo tenga claro y que lo dé todo, que nunca se quede a la mitad. Luego que busque un estudio de grabación que lo haga bien, desde el principio, el mastering de la canción es lo más importante. Tiene que sonar bien. Luego si quiere meterle videoclip es otra cosa. Pero básicamente que lo haga con ganas.
Fotografía de portada cortesía de @im_fotoox_69