Rafa Pabón es de los artistas que no se callan. De los que creen en la convivencia y el respeto. De los artistas que promueven el fomento de la educación y la igualdad. Además de artista, este ejemplo a seguir lanzó hace unas semanas «10:22«, su último trabajo compuesto por ocho cortes.
Tienes un estilo que va desde el rap, pasando por el reggaetón y acaba en el merengue. ¿Qué música escuchabas de pequeño para nutrirte?
Crecí escuchando de todo. Silvio Rodríguez, Tego Calderón, Don Omar, Calle 13… Nunca me he limitado a escuchar un solo género y es porque nunca me he visualizado como un artista de un solo palo.
¿Qué es de lo primero que empezaste a escuchar para aficionarte a la música?
Pues mira, empecé escuchando salsa, y eso que al principio ni me gustaba cuando era pequeño (risas). Les decía a mis papás que me pusieran reggaetón y rap pero no me hacían caso. Conforme fui creciendo yo mismo me enamoré de la salsa. Es sin duda, hoy en día, mi género favorito y del cual me nutro.
También, desde pequeño intenté no seguir la norma ni hacer lo que ya estaba escrito, simplemente intentaba traer cosas nuevas a la mesa.
¿Y tenías un referente en esa época que te llevara a la música?
Para mí fue Calle 13. Sin duda, ellos fueron en los que me fijé y dije: “Hermano, yo quiero hacer música, quiero hacer eso”. Para mí ellos fueron innovación y me inspiraron a hacer cosas diferentes. Tenía muy claro que si yo me iba al género no quería hacer lo que ya estaba hecho, quería marcar un nuevo capítulo en la historia de la música. Y, a día de hoy y tras mucho esfuerzo, lo hemos hecho.
Me da la sensación de que los puertorriqueños estáis hechos de otra pasta. Habéis sido los precursores de la fusión en América Latina y siempre habéis expresado unión entre todos los artistas que sois de allí.
El género urbano en Puerto Rico es un género en el que colaboramos mucho. Entre nosotros siempre nos apoyamos, tanto a los artistas que ya tenemos un recorrido como a los nuevos.
Por ejemplo, el que salgan artistas como yo con otra mentalidad es fruto del apoyo de los que estaban antes de que saliera. Siento admiración por los artistas que se atrevieron a innovar y dar ese paso. Tenemos que seguir haciendo cosas que no están y seguir dándole al mundo el color caribeño que nos destaca, es algo que tenemos en la sangre y por eso salen los artistas tan especiales que hay en PR.
El mundo latino ha entrado muy fuerte en la música desde los 90. Le “habéis comido la tostada” a los estilos americanos que estaban en tendencia en la industria musical.
Creo que los tiempos han cambiado mucho, ha surgido una fuerza que antes no había. La realidad es que los artistas con más números son latinos. Es algo que está pasando y los raperos de ahí afuera quieren trabajar con los latinos y meterse en este mercado, porque hay mucho dinero y, porque ahora mismo es el foco, es lo que más se mercadea y lo que más se escucha del mundo. Cada vez va a haber más colaboraciones de artistas no latinos con nosotros.
Travis, de hecho, se ha lanzado.
Travis y también Drake.
Has sacado un EP de 8 temas, “10:22”. ¿Por qué este nombre?
Es la hora en la que yo nací y creo que es el mejor nombre que le puedo dar para definir lo que yo soy y mi proyecto musical. A las 10:22 nació mi proyecto musical y nació mi persona, ahí marcó todo lo que yo soy.
Dentro del propio trabajo, en “Bandido” parece que haces una crítica a la sociedad actual. ¿Te has encontrado en la vida y en la industria con estereotipos?
No te podría decir que lo he vivido en el género ya que, como te he comentado anteriormente, ha roto muchos esquemas y se ha popularizado tanto que es bien difícil que te discriminen por ser de este palo. Saben el peso del género y que tienen las puertas abiertas.
Lo que sí puedo decir es que Daddy Yankee, Tego Calderón, Don Omar… Tuvieron que vivir en sus inicios esa discriminación por ser de barrio y ser de la calle. Yo también lo he sentido, pero no dentro de la industria, y por eso es importante usar el peso que uno tiene y el alcance para lanzar un mensaje y concienciar, no nos podemos quedar callados.
La gente no se pregunta porqué estás en la calle, por qué has podido nacer o vivir en un barrio más complicado, y por ello lanzo “Bandido”. Es un problema de la educación y falla en muchos aspectos, no solo en mi país sino en el resto del mundo. No es una prioridad y debería serlo. Tenemos que aprovechar la repercusión que tenemos para abrirle los ojos a la gente, y que no señalen a alguien porque esté en la calle, sino que se pregunten el porqué están ahí, ayuden y no juzguen.
No tienes problema en reivindicar y denunciar los problemas sociales, ya lo demostraste también en “Sin aire”. ¿Utilizas la música como herramienta de concienciación política y social?
Totalmente. La música es la herramienta más grande que tenemos para hacer llegar un mensaje e influenciar a la gente. Obviamente hay dos maneras de hacer música: influenciar positivamente o influenciar negativamente. Yo soy una persona que vine a hacer música para marcar un legado y expresarme, no dejando pasar a las cosas que me afecten.
Hay que intentar reivindicar temas como el racismo, está bien que pongamos a la gente a bailar y disfrutar, pero tenemos una misión social, estamos educando a la gente. La realidad es que tenemos demasiado poder para hacer que la gente pueda pensar distinto.
¿Tiene esto que ver con la situación de inestabilidad política en Puerto Rico?
Tuve la oportunidad de estar en todas las protestas también, de hecho, hice un tema que se llama “Manos arriba”, que es referente a esas protestas y esa situación que pasó. Los problemas de Gobierno es algo que pasa en todos los países y mucha gente se identifica.
Lamentablemente, mientras siga habiendo un Gobierno corrupto y siga habiendo injusticias van a seguir habiendo temas como estos, ya que es una problemática. Y yo por lo menos, en mi caso, desde el día uno que entré en la música tuve claro que quiero llevar un mensaje y no me voy a quedar callado ante nada.
¿Por qué crees que muchos artistas no se atreven a mojarse? Si muchos más lo hicieran cambiarían las cosas antes.
Hermano, totalmente de acuerdo. Yo no sé si es que no saben el poder que tienen o que no se atreven por, quizás, no perder público o que la gente los catalogue de una manera. A mí eso no me preocupa, porque si a la gente no le gusta la manera de la que pienso no debe ser mi fanático. El fan que me admire a mí y a mi música tiene que respetar mi forma de pensar. No quiero decir que tengas que estar de acuerdo con mi ideal, pero sí respetarlo. Yo puedo ser amigo de alguien que tenga otro ideal diferente a mí y eso me define, se llama convivencia.
Que seas artista, seas famoso, tengas dinero, etc. No te hace alejarte de los problemas. Tú sigues teniendo los mismos problemas que todo el mundo y debes ser real.
La gente suele cancelar a los artistas por hacer equis cosas. ¿Qué punto piensas que es una barrera que no se debe traspasar?
Yo creo que somos seres humanos, no tenemos porqué limitarnos. No hay unas reglas en el género que te digan que tienes que hacer esto o lo otro… Respeto a todo el mundo por igual, aunque no esté de acuerdo con la gente. Sentimos y padecemos igual y creo en las personas no en las creencias.
Para finalizar ¿ronda por tu cabeza algún estilo que te llame la atención y no has experimentado musicalmente?
Hermano, quiero hacer algo con un coro de iglesia o sinfónico. Es algo que no he hecho y quiero hacer. Aunque en el disco que voy a tirar tengo temas de bossa nova, de boleros, salsa, bachata… Está al 90% hecho, aunque aún no hay fecha.
Un auténtico placer hablar contigo y que tengas el valor de hablar de lo que piensas.
Hay que hacerlo, estamos activos y bendiciones hermano.