Todo aquel que alguna vez haya estado en Madrid, sabe que cada día de la semana hay mil y una manera de pasar un rato escuchando música. Ya bien sea en un bar, en un garito de mala muerte o en un rincón del metro. Pero lo que pocos saben es que los domingos a partir de las 12 del medio día, nuestros amigos de Attic Madrid abren la puerta de un ático de la capital.
Con ubicación secreta hasta el día de antes, melómanos y no tan melómanos acuden a esta ceremonia que se celebra a la luz del día en un ático, a disfrutar de un concierto. Llama la atención, como de si de un oasis en mitad de una jungla de cemento se tratase, el silencio que se respira acompañado por los acordes de dos guitarras. Patrocinado por Cervezas Madriz, solo basta apuntarte a la lista de invitados para asistir a esta misa de música y terminar el fin de semana de la mejor manera.
Con dos descansos durante la sesión, se puede hablar con los artistas, los organizadores y los asistentes. Ya se venga de empalme de la noche anterior del sábado, o se venga bien duchado y desayunado, la buena experiencia está asegurada. Pocas veces se verá algo tan íntimo, donde artista y público conecta de una manera tan especial con gafas de sol.
A sabiendas de que no es posible empezar mejor un domingo, Attic Madrid junto con Cervezas Madriz ofrecen dos tipos de cervezas para que te vayas de allí con doble buen sabor de boca. Los áticos que se reservan siempre están alrededor del centro de la ciudad lo que nos columpia a disfrutar del resto del día por barrios como el de Las Letras o La Latina.
Esta vez los invitados fueron los hermanos de Destino 48, originarios de Gijón. Decidieron apartar el rock y se fundieron con el aire que se respiraba aquel domingo 10 de febrero con un precioso acústico, donde tocaron varias canciones suyas de sus dos discos, entre ellas Utopía, una de mis favoritas, y algunas de Andrés Calamaro y Xoel López.
La sesión finalizó con el aplauso de los que fuimos a verlos, donde el sonido de las palmas nos despertó del mágico trance que conseguimos crear todos los que decidimos aprovechar un domingo.