Bajo el manto otoñal y la lluvia se escriben unos versos. Es la pluma de Francisco Barajas (Granada, 1956) la que se mueve, rauda, hasta configurar un libro de más de cuatrocientas páginas. Estampas de libro antiguo (Editorial Quaestio, 2020) es un poemario extenso, pero lleno de riqueza temática.
En él, cada estrofa es independiente y, aunque forma parte de un poema, puede leerse por separado. Además, en la primera parte hay estrofas de doce versos, y en la segunda, de nueve. Entre los versos de este libro, dividido en dos partes, el lector encuentra el alma humana al descubierto: desde confesiones y desamor hasta poemas íntimos e, incluso, lúbricos. Los poemas al sol se mezclan con los de noche y mar y se extienden en versos largos, entretejidos con descripciones que convierten los objetos o personas de los que habla en entes tangibles para el lector.
Los poemas de Barajas también contienen una gran carga de crítica hacia el dinero, las desigualdades, el racismo y la religión. Las críticas más duras de estos poemas, que no se recluyen en el sentimentalismo vacuo, se dirigen hacia la política. «Un político que no miente es un oasis sin desierto», reza uno de los versos del libro. «La política es una terrible máquina trituradora mortal / que engulle a millones de indefensos ciudadanos, / habrá tener cuidado con ella porque manipula banderas y países», dice en otro.
El ser humano es una máquina de construir deseos e ilusiones, y los versos sostenidos por los adjetivos lo demuestran con los temas que trata. Además de los ya nombrados, está la necesidad de sentirse amado, la paternidad, el amor que se marcha y el anhelo de ser feliz. Barajas también critica el carácter egoísta e inhumano de algunas personas, así como el colonialismo y la esclavización. Mezcla los temas, pero siempre aparece el ser humano, y su conducta, como eje central.
Además, son versos comprometidos con el desempleo, la soledad y la naturaleza. La valentía, el amor, el paso del tiempo y las etapas vitales también tienen un espacio importante. El autor dirige su voz para reclamar más atención a la cultura y también denuncia las guerras. Son poemas, en suma, que encierran simbología, pero que también expresan con claridad los tormentos y las cuitas del alma humana. La vida, en definitiva, con total libertad de palabra.
En Nostromo Magazine hemos hablado con Francisco Barajas sobre el desamor, la política y la poesía, y este ha sido el resultado:
¿En qué te inspiraste para escribir estos poemas?
No creo en absoluto en la inspiración. Escribir en mí es hacer aflorar la necesidad interior de dejar salir lo que simplemente expreso a través de mi trabajo creativo. Y, en este caso, es lo literario por medio del poemario Estampas de libro antiguo. Es dejar salir a mi prosa poetizada creativa escribiendo sobre lo vivencial humano que es cotidiano y que significa exteriorizar las experiencias del día a día. La inspiración es el laborar diario frente a unos folios en blanco a los que se le agregan palabras para hacer frases que comunican ideas y reflexiones más o menos poéticas. Mi prosa poetizada es expresar lo vivido, lo que me gustaría haber vivido y lo que no he vivido. Es la memoria al servicio de expresar las experiencias vivenciales.
¿Cuánto tiempo te llevó escribirlos?
Hay que escribir todos los días. Y, a ser posible, así también lo aconsejaba García Márquez, que lo escrito no sea muy largo, aunque sí lo suficientemente bueno como para satisfacer al autor. Menos de un año, quiero recordar, que tardé en escribir Estampas de libro antiguo. Ni mucho ni poco tiempo, creo que lo suficiente para mí, ahora sólo me dedico a la literatura, novela, relatos cortos y poesía, porque el periodismo está ya pasado de mi minutero diario.
¿Cuáles son tus poetas de cabecera?
Me gustan muchos poetas. Amo a Homero, Quevedo, Machado, Alberti, Aleixandre, Bukowski, Artaud, Pavese, Borges y a Ángel González, por ejemplo. Amo a todas y todos los escritores y poetas, ellas y ellos, que me conmueven y me comunican. Y también a los que me hacen reflexionar al enseñarme sus vivencias y sus ideas. Leo todo lo que cae en mis manos. Y algunas lecturas me gustan y otras me gustan menos.
Estos poemas están cargados de amor y desamor. ¿Qué significa el amor para ti?
El amor es esencial para la vida humana, aunque lo malo, lo pésimo, es que los humanos lo practican muy poco. Y dado su ancestral egoísmo y su barbarie de animal joven que ha evolucionado con mucha rapidez y es un depredador nato. Para mí, el amor significa olvidarse del egoísmo y respetar a los que tenemos a nuestro lado, ya sean mujeres u hombres.
¿Es la poesía la mejor vía para canalizar tu pensamiento sobre el mundo actual?
Por ahora sí, y dado que ya no ejerzo el periodismo. También en mis novelas y relatos cortos me puedo expresar y comunicar mis pensamientos. Y escribo algo en las redes sociales, pero sin adocenarme ni enriquecerme con tantos descerebrados que escriben en ellas. Menos mal que la mayoría de mis amigos en las redes sociales son personas que me enseñan mucho y bien porque son, ellas y ellos, extraordinarios. El mundo actual es como un oscuro pozo sin fondo que nos llevará a la hecatombe final.
Un verso del libro dice: «Somos varados hombres nacidos entre luces, tinieblas o ideas». ¿Actualmente vivimos en un mundo de luces? ¿O de tinieblas?
Vivimos actualmente en un mundo decadente. Y en el que estamos dominados por unas economías decadentes, unas castas sacerdotales políticas decadentes, unas culturas decadentes de falsos gurús culturetas y unas sociedades civiles decadentes, egoístas e idiotizadas. Las luces son pocas y las tinieblas abundan en demasía. Mucho ganar dinero y pocas ideas para erradicar el egoísmo, las irracionalidades humanas y las guerras fratricidas y cainitas. Cultura, mestizaje, honor, respeto, comprensión, tolerancia y solidaridad es lo que debe de abundar, y no todo lo contrario.
¿Crees que el hombre es un lobo para el hombre, como dice aquella cita latina?
El hombre es un depredador nato del mismo hombre. Los lobos quizá sean más humanos. El hombre es un caníbal para el propio hombre, y sin que ahora se los coman físicamente y ya que alimentarse hay muchos hombres que se alimentan de los mismos hombres cuando los explotan y los esclavizan con el Libre Mercado del sistema capitalista.
En tus poemas hay mucha crítica a la política y a los políticos. ¿Qué opinión te merece la política actual?
Yo soy un hombre político, aunque no un animal político. Los animales políticos son los políticos corruptos y los que practican la partidocracia en vez de hacer uso de la democracia universal. La política actual es la sinrazón de las ideologías políticas. Es la negación del consenso político para buscar soluciones del pueblo, para el pueblo y por el pueblo. Es la puta decadencia política que cada vez hace más pobres gobernados y administrados y muy pocos ricos que son ingobernables. Es el engaño más enorme junto con las religiones.
Hay una estrofa en la que citas en varias ocasiones la palabra “caminante”. ¿Es un homenaje a Antonio Machado?
Siempre hay que caminar, no hay que abandonarse nunca. Machado merece mil homenajes, aunque cuando yo escribo caminante, me refiero al ser humano que tiene que caminar a diario por la vida, por la senda de cada uno de los seres humanos.
Por último, Barajas nos recomendó el Quijote de Cervantes. Un clásico que no pasa de moda y que, según nos dijo Barajas, debe leerse más en nuestro propio país.
