El domingo por la tarde tuvimos el placer de asistir a la rueda de prensa del equipo de la película Jefe y, de forma posterior, poder realizarles una entrevista. Carlos D´Ursi nos mostró su visión particular que tiene sobre el filme tanto de actor, como de productor de Jefe.
¿Cómo ha sido hacer comedia para ti, ha sido difícil?
Hacer comedia es lo más difícil que hay, por eso es el reto al que me quería enfrentar. Hacer una comedia y que también tuviese una historia que contar. A mí Jefe me gusta mucho por un lado, como productor porque para mí la comedia es como para el verano salir, tomarse unas cañas, reírse de la vida, reírse de uno mismo, pasar un rato charlando y también saber que, aunque a veces la caguemos como la caga Luis Callejo o como la caga mi personaje también, pero hay otra vida. Hay que echarle cojones a la vidas, si le echamos cojones a la vida, de pero no de cualquier manera, echar cojones no significa pegar un puñetazo en la mesa, pero si le echamos cojones podemos sobreponernos y esto para mí es el gran mensaje de la película y encima te lo cuenta riéndonos. Es lo más.
Y bueno, el personaje de Luis Callejo es muy exagerado pero es realmente lo que se da en nuestro día a día, ya que hay jefes déspotas y que nunca se ríen. ¿En qué os inspirasteis?
Jefe es la historia de España, que se creía invencible y que al final a base de hostias ha aprendido que no lo es. Jefe es la historia de una España que creía que poniendo ladrillo sobre ladrillo nos íbamos a hacer multimillonarios y luego nos hemos dado cuenta que así no era pero, que tenemos muchos otros talentos y claro está que, a veces, para poder crecer hay que pisar las espinas, porque para llegar a ver la rosa y el capullo, nunca mejor dicho tienes que pasar por muchas espinas. Pero, eso es lo que nos ha hecho y está haciendo grandes.
En los últimos años, nos encontramos con medios digitales interesantes que han encontrado su espacio ya que han muerto aquellos tradicionales, entonces sí que es verdad que hay que pasar una catarsis. Entonces Jefe simboliza esa catarsis pero que nunca se perdió la sonrisa. El español es único y es la manera que tenemos de enfrentarnos a los dramas con esa dosis de humor que es de inteligencia, porque el humor es de personas inteligentes.
Cómo has vivido la película siendo productor y uno de los actores, ya que habrás sentido más presión
Trabajar se trabaja con el doble de presión, porque eres el contratante y el contratado. Siempre tienes presión, siempre tienes responsabilidad. Nunca paras, en ningún momento. Para mí, sin embargo, se está transformando en una tónica bastante normal. Yo trabajo en muchas cosas como actor en las que no produzco, pero normalmente todo lo que produzco es algo que me interesa como actor, eso está claro. Entonces, yo soy un actor que produce películas que le interesan mucho y que se lía la manta a la cabeza para poder poner un protagonista tan importante como Luis Callejo porque voy a cumplir 40 años dentro de diez días y he aprendido que el ego es inversamente proporcional. Dignidad, sí, orgullo, también pero el ego no y entonces Luis Callejo me dice: «¿Por qué no te poner de protagonista?». Hombre porque Luis es un actor que le viene mejor a la película. Por lo tanto como productor me busco las mejores películas que me interesen como actor y que tengan un papel adecuado para mí.
¿Cómo elegiste a los actores? En la rueda de prensa habéis dicho que con Juana Acosta habíais pensado desde el primer momento en ella para el papel y con Luis también
Sí, tuvimos algún pensamiento de incluir a un actor de estos que están en muy del momento pero lo desechamos rápidamente porque la calidad humana de Luis es superior a la del otro actor que estábamos pensando.
El director ha dicho que la película tenía un presupuesto bajo
Sí, luego lo hemos hablado y le he preguntado que a qué se refería con bajo presupuesto. Queríamos decir que no necesitábamos efectos especiales ya que para contar esta historia y transmitir el mensaje no nos hacía falta más. Hemos tenido los recursos que hacían falta. Es una película que no es cara, eso sí, el concepto es muy fácil, sabíamos lo que queríamos contar y con ello hemos ido.
Qué próximos proyectos nos podrías adelantar
El próximo viernes estreno en cines comerciales mi cortometraje como director que estuvo nominado a los Premios Forqué con Tabib in memoriam del último pediatra de Aleppo. Luego en agosto me voy a Chile a rodar Los Fusileros que es la película sobre la banda terrorista que intentó derrocar al régimen de Pinochet un libro muy famoso, un bestseller latinoamericano muy importante y luego para el próximo año tenemos una batería muy importante, pero cosas que no se pueden contar.
Qué crees sobre a lo que ha hecho referencia el director que hay que ensayar dos semanas antes, o crees en la improvisación
Yo soy un actor de trabajo. Yo creo mucho en los ensayos. Creo que la espontaneidad nace en base a mucho trabajo y mucho ensayo. No puede moverte dentro de un entorno con relajación si no sabes cuales son los límites, te puedes pasar por un lado o por el otro. Una vez que como actor yo se de donde a donde me puedo mover, ahí dentro soy libre y haré lo que me salga de ahí. Pero primero quiero, necesito y le exijo al director que me diga de dónde a dónde hay que ir porque así yo sabré cuál es mi campo de acción. Mi parte de italiano sigue estando ahí.
